Mi corazón entró en coma
Y no me preguntes desde cuándo.
¿Por qué? me dice en silencio tu
mirada
triste, pero no tanto como la mía,
y ni te atrevas a preguntar
porque no tienes derecho ninguno
Es necesario no hablar, ni siquiera
con los ojos, esos que ya no me miran,
y mis dedos que se niegan a escribir,
porque no solo cegaste mi vista si no
que cortaste mis manos,
junto a las intensidades y fluires
del alma
que no quieren ya revivir emociones
¿Qué es una estupidez?
¿Qué exagero?
¡Vaya! Es que entonces nunca
comprendiste
La intensidad y fuerza de mi amor,
Pero bueno, eso ya pasó… es solo que
te llevaste mi inspiración y en un
rincón yacen
mis sentimientos tristes, y entonces
entré en coma
aquel día en que nada, nada te
importé
quedando a la deriva, perdida y
silente.
Aprendí caballero que no importa si
soy sincera.
Aprendí caballero que el dolor no
llega ni penetrará
nunca, el corazón de quien no sabe
amar.
¡Qué nada entendí!
¿O sea que más encima crees que soy
tonta?
¡Claro! Lo soy… y con mayúscula,
porque creí
y nada me hace salir de mi estado de
coma
silente sumergido en la vacuidad
donde mi alma
perdió su magia, y los sueños
inconscientes y despiertos
Sola y callada mi corazón duerme… en
coma