Cuantas palabras diluidas en el viento,
llevadas por los mares.
llevadas por los mares.
Sabía ella que
no había posibilidad
y se permitía llorar…enfurecida y tranquila,
ya el tiempo se llevó sus sueños,
su forma de ser, cuando su piel
era como el suave pétalo de una rosa
y sus entregas, anhelos, ya colgados
tras la puerta, permanecían silenciosos,
testigos mudos de sus lagrimas,
ahora solo volaba entre la lluvia de sus ojos ,
sobre la alfombra de silvestre hierba,
escribiendo historias y poemas
se iba su alma de recuerdos,
solo pedía que la dejara llorar
vaciando ese rojizo cántaro de amor al río
de penas, amores y alegrías suaves,
muchas margaritas desojadas por el viento.
y se permitía llorar…enfurecida y tranquila,
ya el tiempo se llevó sus sueños,
su forma de ser, cuando su piel
era como el suave pétalo de una rosa
y sus entregas, anhelos, ya colgados
tras la puerta, permanecían silenciosos,
testigos mudos de sus lagrimas,
ahora solo volaba entre la lluvia de sus ojos ,
sobre la alfombra de silvestre hierba,
escribiendo historias y poemas
se iba su alma de recuerdos,
solo pedía que la dejara llorar
vaciando ese rojizo cántaro de amor al río
de penas, amores y alegrías suaves,
muchas margaritas desojadas por el viento.
Lloraba extrañando su respiración acompasada,
el refugio cálido de su pecho tibio que la cobijaba,
sus ojos enrojecidos, cerrados para no verle
y sentirlo a plenitud, no la dejaban escribir,
lloraba su alma gruesas lagrimas como la resina
de un árbol herido y caían por su rostro fugitivas.
el refugio cálido de su pecho tibio que la cobijaba,
sus ojos enrojecidos, cerrados para no verle
y sentirlo a plenitud, no la dejaban escribir,
lloraba su alma gruesas lagrimas como la resina
de un árbol herido y caían por su rostro fugitivas.
Resumiendo su corazón se había inútilmente enamorado
y lloraba distancia imposible de salvar,
el tiempo tarde los reunió…
y lloraba distancia imposible de salvar,
el tiempo tarde los reunió…