En medio de la maraña de la vida, sus ires y venires, irrumpe en su vida, despertando en ella mariposas, todas ellas… de bellos y alucinantes colores, que hacen que lo lleve en sus alas mas allá del horizonte, experimentándose intensamente, vuelan por doquier, nada escapa a ellos, ni los solitarios prados por donde ruedan apasionados, cada lugar, cada rincón, adquieren un significativo sentido de amorosa dulzura y deseos sin reprimir, ocultos al mundo menos al viento que lleva y trae virtuoso de sentimientos, imaginación y visualización sus sentires, sus emociones y acciones escritas en nubes que el soplo inevitable se lleva para dejarlas en otra nubecilla lejana, que el sol con su fuerza aniquilará, como todo en la vida que comienza, lleva impreso su final.
Ahora es el presente y se viven antes de que sea más tarde, ella lanzándose al mar sin saber nadar pues segura de tener en cada lugar ese refugio que la acoge, más él no sabe porque las nubes no le han contado que ella es poseedora de una fortaleza, aprendida a lento pulso preparada para…