viernes, 25 de octubre de 2013

Ya no sé

Ya  no sé  si quiero pensarte,
ya no sé si quiero soñarte,
ya no sé si  quiero que tu sombra
en mis sabanas pernocte.
Te pensé, te soñé y te sentí tanto a mi lado,
que me vestí  de aire, envolvente y suave
para que siempre en mis brazos estuvieses,
pero el tiempo implacable caminaba sin descanso
y tú no estabas, ¡quebrando tanto mi sentir!
Que mi sombra se comenzó a esfumar
ya  cansada de esperarte.
En una noche oscura perdida en la nada,
mi fantasma recorrió senderos sin luna,
plagados de lluvias acaecidas,
porque a mí, ya no me rosaban
y tus susurros  de mí se alejaban,
elevados lejos por el viento funesto,
con un dolor que se aleja y se pierde,
un sueño que se esfuma con el sol,
un pensamiento que olvida
que alguna vez te quiso.



Shedar                                  

¡Déjame!

Déjame jugar en tus labios candentes y húmedos
porque me desvelas haciéndome en tu boca pensar.
Esta noche que la luna esquiva escondida está,
silenciosa viajaré cual  sombra de nocturno vestida,
a robarte muchos besos que con el alma te  quiero dar.
Nada es como el calor de tus labios para que hagan mi sol brillar.
¡Déjame jugar en tus labios! cálidos y suaves,
inventando besos que subyuguen tu boca
y hagan tu piel erizar.


Shedar