Los fui sellando e etiquetando cuidadosamente,
muchos de ellos he reunido para emociones especiales…
Ordenados en la vitrina como preciosos cristales
a veces cuando sola me quedo, saco alguno y lo huelo…
Para que la fragancia de los aromos, vainilla y canela
me impregne de hermosos recuerdos como aves en vuelo.
A veces abro alguno que dice besos…
Para saborear tus labios en un momento de esos...
A veces elijo alguno, lo abro con cuidado
y lo palpo suave como la miel…
Para que tu piel nunca se aleje de mi piel.
Otras debo abrir uno que dice palabras olvidadas,
para escribirte un bello poema sin olvidar nada.
Pero si alguna vez abro un frasco de heridas escondidas…
están en un frasco negro muy guardadas
para no se le ocurra a alguna… saltar fuera cuando lo abra
y dañar mi alma con denuedo de palabras.
A veces abro el frasco de los sentimientos
para enviarte mis te quiero con ráfagas de viento
que traspasen océanos, montañas y llanos en todo momento.
Pero cada cinco minutos abro un frasco, el más preferido…
el de los abrazos, para sentirme en tu pecho y cobijada entre tus brazos
Dime amor…
¿Necesitas un frasco especial para guardar mi corazón?