Llueve
intensamente esta tarde, con un viento congelante
y fuertísimo.
Manzana, de pelaje
café con una mancha blanca y alargada, desde la nuca a su nariz, la potranca…
de vez en cuando relincha, tiene hambre, jamás cepillada y amarrada siempre, no
tiene más de tres metros de libertad, de pie sobre una pequeña loma, donde un
árbol generoso le brindaba algo de cobijo, bajo la torrencial lluvia y la
helada, sin tener donde guarecerse, con su cuerpo tenso, estoicamente soportaba,
Dios… ¡me trituraba el alma!
A unos
metros de distancia, un perro pastor alemán, también amarrado permanecía cerca ,nunca lo soltaban porque… decían les comía
las gallinas, por su pelo corría la lluvia, saltando de un lado a otro de un
riachuelo que crecía a medida que la
lluvia no cesaba y que se formaba con el agua que bajaba de la cañada, Rex atravesaba
por el agua cuando ya no podía saltarlo… la misma dueña, le tenia un simulacro
de casa con latas y sin piso, ubicada en
el lecho del riachuelo, su amarra no le permitía entrar a ella, mas tampoco le habría
servido, pues el agua entraba… inundándola, el ladraba todo el día y toda la
noche, saltaba sobre la lata del techo de su supuesta casita, ambos sufrían el
desamparo y maltrato de sus dueños indolentes, que decían a todos que ellos amaban a los animales… ¿amor?
uffffffffffff, no conocían nada del
amor, ni de misericordia.
Alguien,
supimos que los denunció, porque ella la mujer, despotricaba insultando al
aire, gritando que debía de ir a la fiscalía, al día siguiente, hicieron desaparecer
a Rex, ya no lo vimos más, después de eso, soltaron a Manzana dos días, ella corría por el terreno, hasta que la
perdíamos de vista, volvía de noche y la amarraron a una tina de baño enlozada que ella
lentamente arrastraba caminando
en busca de pasto que iba comiendo a su paso, desde la madrugada se
sentía el sonido cuando la potranca arrastraba la tina con ella…como alma en
pena, después la amarraron al mismo cordel
que antes usaban para el perro, así está ahora, su pelaje desgastado por
sectores en su cuerpo, como si fuera tiña, muestran el descuidado aspecto de
animal casi abandonado y mal alimentado.
Más…ninguna
autoridad apareció a constatar la realidad y veracidad de los hechos, esa mujer
y la mentira ganaron es estos días.
Sin ver los
ojos de Manzana…frente a los míos…los sentía...tristes, como sus pasos en el
pequeño río.