ALMA EN SILENCIO
Desde que te
fuiste,
mi alma
quedó en silencio,
vagabunda,
perdida y solitaria
en una
espesa niebla
y
languideció la noche sin ti.
Quiso mi
alma triste abrazar
la tuya con
fervor, pero…
dolorosamente,
mis brazos
permanecieron
vacíos, desgarrados
en la fría y
oscura calle,
cuando mis
ojos húmedos,
solo vieron
un ocaso en gris y negro.
Entonces
quise matar esa parte de mí,
que aún
insiste en esperarte.
Shedar